
Cerca de 43 % de las adolescentes de 15
a 19 años ha tenido relaciones sexuales en algún momento.

Más de 4 de cada 5 (86 %) usaron
anticonceptivos la última vez que tuvieron relaciones sexuales.
Menos de 5 % de las adolescentes que
usan anticonceptivos usan los tipos más eficaces.
Tener bebés en la adolescencia puede
implicar costos de salud, así como económicos y sociales para las madres y sus
hijos. En los Estados Unidos ha descendido la tasa de nacimientos en
adolescentes, sin embargo, en el 2013 nacieron más de 273 000 bebés de madres
adolescentes de 15 a 19 años. La buena noticia es que una mayor cantidad de
adolescentes está esperando antes de tener relaciones sexuales, y entre
aquellas que son sexualmente activas, cerca del 90 % usó anticonceptivos la
última vez que tuvo relaciones sexuales. Sin embargo, las adolescentes usan con
más frecuencia condones y píldoras anticonceptivas, que cuando no se usan de
manera sistemática y correcta, son menos eficaces para prevenir embarazos. Los
dispositivos intrauterinos (DIU) y los implantes, que se conocen como
anticonceptivos reversibles de larga duración (LARC, por sus siglas en inglés),
son los tipos de anticonceptivos más eficaces en adolescentes. El uso de los
LARC es seguro, no requiere que se tome una píldora cada día ni que se haga
algo antes de cada relación sexual y, según el método que se use, puede
prevenir el embarazo durante 3 a 10 años. Menos del 1 % de las mujeres que usan
LARC quedan embarazadas dentro del primer año de uso.
Los médicos,
enfermeros y otros proveedores de atención médica pueden:
·
Instar a las adolescentes a no tener
relaciones sexuales.
·
Reconocer a los LARC como una opción
segura y eficaz de anticoncepción para las adolescentes sexualmente activas.
·
Ofrecer a las adolescentes una amplia
gama de opciones de anticoncepción, incluidos los LARC, y hablar sobre las
ventajas y desventajas de cada una.
·
Hacer capacitación sobre cómo colocar y
retirar los LARC, tener suministros de estos dispositivos disponibles y
explorar las opciones de financiamiento para cubrir el costo.
·
Recordar a las adolescentes que con solo
tener un LARC no están protegidas contra las enfermedades de transmisión sexual
y que se debe usar también un condón cada vez que tengan relaciones sexuales.
Problema: Pocas adolescentes (de 15 a 19
años) que usan anticonceptivos usan los tipos más eficaces.
El uso de
anticonceptivos reversibles de larga duración (LARC) es bajo.
·
Menos de 5 % de las adolescentes
que usan anticonceptivos usan LARC.
·
La mayoría de las adolescentes usan
píldoras anticonceptivas y condones; estos métodos son menos eficaces para
prevenir el embarazo cuando no se usan correctamente.
·
Hay varios obstáculos para las
adolescentes que podrían considerar usar un LARC:
o Muchas adolescentes saben muy poco
acerca de los LARC.
o Muchas piensan erróneamente que no
pueden usarlos debido a su edad.
·
Las clínicas también reportan
obstáculos:
o Alto costo inicial para abastecerse de
suministros.
o Posible falta de conocimiento de los
proveedores sobre la eficacia y seguridad de los LARC en las adolescentes.
o Los proveedores podrían no tener la
capacitación para colocar y retirar estos dispositivos.
Los
proveedores pueden tomar medidas para aumentar el conocimiento y la
disponibilidad de los LARC.
·
El Título X es un programa federal de
subvenciones para apoyar el planeamiento familiar confidencial y servicios
preventivos relacionados, cuya prioridad son los clientes de bajos ingresos,
incluidos los adolescentes.*
o Los centros financiados conforme al
Título X han usado las pautas clínicas más actuales respecto de los LARC,
capacitado a proveedores en la colocación y retiro de estos dispositivos, y
procurado opciones de anticoncepción de bajo costo o sin costo.
o El uso de LARC en adolescentes aumentó
de menos de 1 % en el 2005 a 7 % en el 2013.
·
Otros programas estatales y locales han
realizado esfuerzos similares.
o Hay más adolescentes y mujeres jóvenes
que eligen usar LARC; esto resulta en menos embarazos no planeados.